Casualidad que ese día movía bien la mar, así que tuve que llevarle a un pesquero protegido y de fácil acceso donde se quedaba mucho la mar.
Abajo Eneko en acción.

Aquí posando con alguna captura que hicimos.
Tras alguna bronca por romper una anilla de la caña y enganchar no se cuantos anzuelos, je,je, al final buscamos una puesta mas fácil de pescar y pudimos disfrutar.
En cuanto a la pesca, poco que contar, son malas fechas para buscar ratos libres y tampoco apetece madrugar, un par de salidas he hecho, una con Ángel donde cogimos tres sargos creo, y este sábado que movió bien y estaba precioso, fui solo y me comían las bogas y la morralla que había, una maja solo salio.
Así que haber si se va quemando la mecha veraniega y vuelve todo a la normalidad para ir tanteando si arriman.
Hasta entonces, SALUDOS.